Uno de los problemas en el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer es que todavía no sabemos qué la causa. Por lo tanto, no tenemos tratamientos que puedan curar la enfermedad. Hasta ahora, todos los mejores medicamentos para los pacientes de Alzheimer sólo controlan en cierta medida los siguientes síntomas. La enfermedad de Alzheimer es un trastorno muy complejo que tiene muchos componentes, entre los que se encuentran los siguientes:
Dado que los síntomas anteriores pueden ser graves y causar una gran angustia entre los cuidadores, es necesario algún tipo de tratamiento. Para la mayoría de los síntomas mencionados, la primera opción de tratamiento es la terapia no médica. Sólo cuando fallan los tratamientos no médicos se debe considerar la posibilidad de recetar medicamentos.
En general, los medicamentos con receta deben ser la última opción, ya que también pueden tener efectos secundarios adversos. ¿Cuáles son los pros y los contras de los medicamentos para el Alzheimer? Pueden frenar los síntomas y prolongar la calidad de vida de algunas personas, pero los fármacos no funcionan para todo el mundo, y sus beneficios no son eternos.
Una vez que se han probado los tratamientos no farmacológicos y no funcionan, el tratamiento farmacológico puede ser la única opción viable. Algunos de los mejores medicamentos para los pacientes de Alzheimer son los siguientes.
MEDICAMENTOS ANTIPSICÓTICOS
Los medicamentos antipsicóticos también se denominan a veces neurolépticos. Estos medicamentos se desarrollaron para controlar la esquizofrenia y otras enfermedades que pueden causar síntomas psicóticos. Son muy eficaces para controlar los delirios, la paranoia, la ira, la agresividad y el comportamiento impulsivo. Los antipsicóticos más comunes utilizados para controlar el comportamiento son:
El haloperidol (nombre comercial Haldol) suele utilizarse para tratar episodios agudos como la ira, la agresividad y las autolesiones.
Sin embargo, los antipsicóticos también pueden tener posibles efectos secundarios adversos, que incluyen los siguientes:
Cuando la dosis del fármaco antipsicótico es elevada, pueden producirse los siguientes efectos secundarios adversos adicionales:
Los pros y los contras de los medicamentos para el Alzheimer incluyen el hecho de que los antipsicóticos pueden disminuir los síntomas psicóticos, como la paranoia, las alucinaciones o los delirios, pero es raro que corrijan completamente estos síntomas en los pacientes con EA. Lo mejor es empezar con la dosis más baja posible de antipsicóticos e ir aumentándola gradualmente hasta que se observe una respuesta. Tardan entre 2 y 4 semanas en hacer efecto y deben continuarse mientras duren los síntomas.
Esta clase de medicamentos se utiliza a veces para controlar los problemas de sueño, la ansiedad, la ira y el estrés. Las benzodiacepinas son medicamentos muy eficaces y funcionan de inmediato. El problema de estos medicamentos es que pueden ser adictivos y también tienen efectos secundarios, como la sedación. Las benzodiacepinas más utilizadas son:
Las benzodiacepinas sólo se utilizan durante periodos cortos de tiempo que varían entre unos días y unas semanas como máximo. Aunque inducen un estado de relajación y proporcionan un buen sueño, no revierten los déficits de memoria. Se utiliza la dosis más baja y se prefieren las benzodiacepinas de acción corta.
Los efectos secundarios de las benzodiacepinas incluyen:
La retirada repentina de estos agentes puede aumentar la ansiedad. Aunque las benzodiacepinas funcionan, su uso debe limitarse a unos pocos días para evitar los efectos secundarios.
Los mejores medicamentos para los enfermos de Alzheimer pueden ser los estabilizadores del estado de ánimo y los anticonvulsivos. En las dos últimas décadas, se ha descubierto que los fármacos utilizados para controlar las convulsiones también son excelentes para modular el estado de ánimo, por lo que también se denominan estabilizadores del estado de ánimo. Los estabilizadores del estado de ánimo más comunes son:
Estos fármacos son eficaces para el tratamiento de los problemas de conducta en la demencia. Algunos profesionales sanitarios prefieren utilizar estabilizadores del estado de ánimo cuando el paciente no tolera los antipsicóticos.
Sin embargo, los estabilizadores del estado de ánimo también tienen efectos secundarios adversos, que pueden ser los siguientes:
Aunque estos fármacos no revierten la demencia, a veces se utilizan para controlar los problemas de comportamiento en determinados pacientes con la enfermedad de Alzheimer.
Un problema anímico muy común en los enfermos de Alzheimer es el desarrollo de la depresión, que puede ser bastante grave. Para revertir la depresión, a veces se utilizan antidepresivos. Estos fármacos tienen otras acciones además de revertir la depresión; pueden aliviar el dolor, proporcionar un sueño excelente y aliviar la ansiedad. Los antidepresivos no funcionan de inmediato y suelen tardar entre 3 y 4 semanas en alcanzar su máximo beneficio. Los antidepresivos más comunes son:
Los antidepresivos también tienen efectos secundarios que incluyen los siguientes:
Los ancianos suelen ser muy sensibles a los antidepresivos y sólo deben utilizar la dosis más pequeña del fármaco. Aunque pueden proporcionar un buen sueño y revertir la depresión, se desaconseja su uso por los efectos secundarios.
En las últimas tres décadas se han desarrollado varios fármacos para tratar los problemas de pensamiento y memoria que presentan los pacientes con la enfermedad de Alzheimer. Entre ellos se encuentran los mejores medicamentos para los enfermos de Alzheimer hasta la fecha. En general, estos fármacos ayudan con algunos problemas neuropsiquiátricos, pero sólo en la fase leve de la enfermedad. Conocidos como inhibidores de la colinesterasa, los fármacos incluyen:
Algunos pacientes con EA obtienen beneficios de estos fármacos, como una mayor concentración, una disminución de la ansiedad y una mayor motivación, e incluso algunos son capaces de mantener sus actividades diarias habituales. Pero estas mejoras suelen durar sólo entre 6 y 12 meses. Su principal ventaja es que retrasan el empeoramiento de la enfermedad durante algún tiempo.
Los efectos secundarios adversos de los inhibidores de la colinesterasa incluyen:
El mejor medicamento para los enfermos de Alzheimer podría ser la Memantina. Se trata de otro fármaco utilizado para tratar las últimas fases de la enfermedad de Alzheimer. Se ha demostrado que el fármaco mejora la atención, la memoria y el lenguaje en algunos pacientes. Suele recetarse con el fármaco donepezilo (Aricept) para obtener el máximo beneficio. La memantina actúa equilibrando los neurotransmisores cerebrales que intervienen en el lenguaje y la memoria. Los estudios muestran que la memantina puede reducir los delirios, la paranoia, la confusión y las alucinaciones, pero, de nuevo, los beneficios no se mantienen durante más de unos pocos meses.
Los investigadores trabajan para encontrar el mejor medicamento para los enfermos de Alzheimer. En el último año se han desarrollado varios fármacos nuevos para tratar la enfermedad de Alzheimer. Estos últimos fármacos se administran por inyección y pueden disolver las placas amiloides del cerebro. Las placas amiloides se han asociado a la enfermedad de Alzheimer y los primeros estudios indican que, al disolver las placas, se puede ralentizar o prevenir la progresión de la enfermedad de Alzheimer. La FDA ha aprobado dos anticuerpos monoclonales para descomponer las placas amiloides en el cerebro: son el aducanumab y el solanezumab. Actualmente se están evaluando otros fármacos similares en ensayos clínicos.
Los primeros resultados son prometedores, pero antes de recibir el tratamiento hay que someterse a un escáner PET para buscar placas. Sólo los pacientes de EA con placas pueden recibir este tratamiento. El otro problema de estos agentes es el coste, que varía entre 28.000 y 56.000 dólares. Aunque Medicare cubre una parte importante del coste, todos los pacientes tienen que hacer grandes copagos. Por último, aún se desconocen los efectos secundarios a largo plazo y los pros y contras de los fármacos para el Alzheimer.
Hay más pruebas que parecen vincular el cerebro y el corazón como una conexión extremadamente importante en los pacientes de Alzheimer. Los estudios de población revelan que las personas cuya presión arterial está controlada y que llevan un estilo de vida saludable tienen un riesgo mucho menor de padecer EA en comparación con las poblaciones que tienen la presión arterial alta y llevan un estilo de vida poco saludable. Por ello, actualmente se hace hincapié en la adopción de un estilo de vida positivo con la esperanza de prevenir la EA en primer lugar. Esto significa comer sano, hacer ejercicio regularmente, dejar de fumar, mantener un peso saludable y mantener la presión arterial dentro de los límites normales Hable con su profesional sanitario si quiere saber más sobre cómo reducir el riesgo de que le diagnostiquen la enfermedad de Alzheimer. Prevenir la EA en primer lugar es una opción mucho mejor que tratarla después.
La administración de medicamentos por vía oral a un paciente con EA puede ser un verdadero reto. Por ejemplo, pueden rechazar o escupir la píldora, o puede que no la traguen porque no saben que es un medicamento. También puede ocurrir que la persona tenga un problema físico que le impida tragar. En estos casos, es importante hablar con el farmacéutico y obtener el medicamento en forma líquida, si es posible. Otra opción es partir la píldora por la mitad o abrir la cápsula y espolvorear el polvo en la comida o la bebida.
Cada día se producen avances médicos en la tecnología y nuevas opciones para el tratamiento de las enfermedades. Es importante estar al tanto de la información más reciente sobre los mejores medicamentos para los pacientes de Alzheimer, así como los pros y los contras de los medicamentos para el Alzheimer. Cano Health quiere que tengas la mejor vida posible y se compromete a proporcionar una atención excelente a sus afiliados y pacientes mayores. Si desea obtener más información sobre cómo Cano Health puede tener un impacto significativo en su vida, llámelos hoy mismo al 1-855-208-7874.
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